Cuando un amigo se va
se queda un árbol caído
que ya no vuelve a brotar
Ese amigo es John Cabrera ( me cuesta el “era” ), una persona con la que he mantenido una amistad profunda durante los últimos veinticinco años llena de anécdotas y de sorpresas, un hombre tan lleno de experiencia y de conocimientos que te sorprendía cada instante que pasabas a su lado. Persona muy querida por todos los que amamos el cine y la fotografía, libre de todo atisbo de vanidad y de orgullo, simple y al mismo tiempo sabio hijo de españoles pero empapado de esa ironía británica que tantos buenos ratos nos regaló.
El diario digital “La Marina Plaza” ofrece hoy una artículo que no tiene desperdicio, un análisis equilibrado que retrata muy bien su trayectoria y todo lo que aportó a Dènia a través del cine por su profesión.
A quien lo haya querido, a quien lo haya tratado y a quien le interese datos de su trayectoria, que no se lo pierda. Este es el enlace
La fotografía que ilustra esta entrada es del amigo común Román Rodriguez con quien compartimos tanta y tan buena amistad con John. Con tu permiso Román.
Precioso artículo y fotografía. Hasta siempre, John!