En realidad debería decir los peores, pero me quedo con el título del libro de Apsley Cherry-Garrand que narra la fallida expedición de Scott al polo sur, pero no es de lo que quería hablar aunque no dejéis de ver los enlaces porque los aventureros de hace cien años fueron realmente los grandes héroes de aquella época y de las posteriores.
De lo que quiero hablar es sobre el hallazgo de los negativos encontrados congelados de una de aquellas expediciones. Como aficionado a la fotografía y por haber disfrutado tanto del negativo y del laboratorio admiro la calidad de las fotos de aquellas expediciones, pero sobre todo de las de la aventura inimaginable de Schakleton. Sobre ella, tengo un libro que me regaló mi hijo. Es uno de esos libros de formato grande con unas copias de las fotos de alta calidad y que de vez en cuando pongo sobre la mesa del comedor ( reconozco que me falta un buen atril ) para disfrutar de las fotos. En Barcelona hace unos años vimos una exposición con datos y simuladores de las condiciones del barco Endurance y de su forma de vida abordo. Una pasada.
En fin, cuelgo esta entrada porque El País hoy publica un artículo de Jacinto Antón sobre tal hallazgo, y con él os dejo
La verdad es que todo lo referente a esos viajes es alucinante… No puedo entender cómo aguantaban tanto con los medios de que disponían, tanto para moverse como para aguantar el frío. ¡Qué fuerza de voluntad!.
Lo curioso, además, es que los negativos los encontraron dentro de una caja en una cabaña, ¡casi cien años después!. ¡Qué cara se le quedaría al que los encontró!.
En fin, una gran historia.