Hoy cumplo setenta años y en el viaje desde esta foto, con cara de mal genio, hasta ahora han pasado unos sesenta y siete e infinidad de vivencias, experiencias y años que forman el camino que va desde las ilusiones infinitas a la nostalgia.
Recuerdos de la infancia inolvidable, de la adolescencia, y de aquellos años que tan importantes me parecieron. Los recuerdos ahora se resumen básicamente entre los de la lejana niñez y los más recientes; en medio han quedado de forma aleatoria el resto, pero casi todos son buenos. No sé los demás, pero mi subconsciente suele borrar los malos.
Sigo teniendo muchas ilusiones porque afortunadamente todavía me mantengo con la salud suficiente y con los recursos básicos para poder mantenerlas. Me queda cuidar de mis hijos y nietos, y me queda la satisfacción y la esperanza de poder compartir con Marijose, con familia y amigos momentos de ilusión y felicidad.
Gracias a la vida, que me ha dado tanto…